Aguardamos ansiosos la píldora del orgasmo femenino prometida por algunos laboratorios farmacéuticos. Tenemos que esperar para ver y creer. Mientras tanto, ¿ vamos a intentar de otra manera?
Anorgasmia Femenina
¿Qué es?
La anorgasmia es definida como la falta de placer del orgasmo (gozo) después de un periodo de excitación normal (con aumento de la lubricación y volumen de la vulva.) Puede ser primaria, cuando la mujer jamás experimentó un orgasmo, o secundaria, cuando dejó de obtener el gozo sexual en los envolvimientos amorosos, antes satisfactorios. Es un cuadro relativamente común, atingiendo aproximadamente 30 % de las brasileñas, en media 7,5 %de las mujeres de nuestro estado.
¿Lo que causa?
La expresión “falta de orgasmo femenino” es una mezcla de frustración, baja autoestima y conformidad. Muchas mujeres sin al menos tentar algún placer sexual, presas por lasos culturales y religiosos ortodoxos, aliados a falta de orientación y educación sexual. “Sexo es para los hombres”. Así niegan sus deseos, evitando la ansiedad de enfrentar una serie de preconceptos impuestos por una educación represora y sexista. La hostilidad al aparcero, el miedo de la pérdida del autocontrol, la falta de deseo generalizada, el dolor en el coito y la instabilidad del aparcero en la actividad sexual son otras causas comunes de esto trastorno sexual.
Después del movimiento de la Revolución Sexual de la década de 60, hubo mayor propagación de la orientación u educación sexual. Todavía, fue solamente en la última década del siglo pasado que la ciencia pudo desvendar la anatomía de los genitales femeninos. Se descubrió que el clítoris, considerado un pequeño órgano de sensibilidad sexual de la vulva era apenas una puntita del iceberg de un órgano mucho mayor, más complejo y especializado en el arte del placer sexual.
También nuevos conceptos evolutivos trajeran a luz datos que alteran la visión de algunos comportamientos considerados anormales. La promiscuidad femenina en el reino animal, por ejemplo, puede ser vista como ventajosa para la evolución de la especie. Los espermatozoides de diferentes machos competerían entre sí dentro de la hembra para fecundar el óvulo y perpetuar su linaje. Los genes más “fuertes” del espermatozoide vencedor garantizarían una prole más competitiva y saludable.
Pero todo esto es muy nuevo todavía. Las mujeres de este nuevo milenio, conforme su cultura y el posible acceso a los medios de comunicación e información, varían en sus conceptos de identidad femenina. La represión sexual aún es significativa y vigora hasta mismo en los centros considerados de mayor intelectualidad del País:
La técnica del placer.
La represión sexual impide la liberación de la fantasía erótica, un factor muy importante para el orgasmo femenino. Caso una mujer no permitiese fantasear y conocerse, descubrir las partes de su cuerpo que más responden a los estímulos, no aprenderá el arte del placer sexual. Diferentemente del hombre que posee el genital expuesto (el pene), la mujer tiene que descubrir el clítoris y la vagina, órganos esenciales para el orgasmo.
La técnica preconiza que la mujer busque inicialmente un auto conocimiento de su cuerpo y de sus partes más sensibles al toque y después la masturbación solitaria (sin aparcero.) Puede hacer uso del espejo par ver sus genitales y de estímulos eróticos como libros, revistas, o mismos filmes sexuales, iniciando sus fantasías. Posteriormente puede buscar la masturbación frente al aparcero y solo después junto con ello solicitando su participación activa en toques o fantasías compartidas.
El orgasmo en el coito es una segunda fase a ser alcanzada y depende de la armonía y confianza del casal. El objetivo es que la mujer pueda soltarse y controlar adecuadamente el ritmo del estímulo del clítoris hecho por el aparcero. Existen técnicas más especializadas como la contracción rítmica de la plataforma del orgasmo (músculos de la vulva) que también ayudan a atingir el suceso de la relación sexual.
Por fin, se aconseja que se haga la introducción peniana concomitantemente a la manipulación del clítoris, hasta que apenas el movimiento del pene rozando la entrada de la vagina y el complejo del clítoris pueda sustituir la función manual. La concentración de la mujer es de vital importancia, aliadas a fantasías que no deben sufrir distracciones. Caso ocurra, el estímulo debe ser renovado con un ritmo más suave hasta poder llegarse al pico nuevamente.
La práctica lleva al suceso del orgasmo, pero es inútil sin la concentración en la fantasía erótica y el auto abandono al placer.