Dolor en el talón
¿Qué es?
El dolor en el calcáneo (talón) es uno de los motivos más frecuentes de consulta ortopédica y puede tener varias causas, pero sin dudas la más frecuente es la Fascitis Plantar, que es la inflamación de la fascia plantar. La fascia plantar es una aponeurosis (tejido que recubre la musculatura) de la planta de pie que se extiende del talón hasta los dedos. La fascitis plantar ocurre principalmente de los 40 a los 50 años de edad y es más frecuente en mujeres que en hombres. El sobrepeso facilita el aparecimiento de esta inflamación en la fascia plantar.
¿Qué es Espolón del Calcáneo (Talón)?
El espolón del calcáneo hace parte de cuadro de Fascitis Plantar y se caracteriza por un crecimiento óseo en el calcáneo, pero es importante resaltar que el espolón no ocurre en la fascia plantar y si en el músculo flexor corto de los dedos que es adyacente a la fascia. Solamente 50 % de las personas con fascitis tienen espolón y 10 % de las personas sin dolor en calcáneo también tienen espolón, así ,no hay reglas para indicación de retirada quirúrgica del espolón.
¿Qué se siente?
El paciente con fascitis presenta dolor en la parte posterior plantar del pie. Este dolor ocurre principalmente en los primeros pasos cuando el paciente levantase de la cama por la maña. Actividades esportivas o quedar en pie por longos periodos también causan dolor importante.
¿Cómo se trata?
El tratamiento inicial consiste del alongamiento del tendón de Aquiles, alongamiento de la fascia plantar y uso de plantillas de silicona para talón. La realización de este tratamiento por 8 semanas deberá traer beneficio para 90 a 95 % de los pacientes. Para los que no respondieran al tratamiento, existen dos opciones: inyección de corticoides en la fascia y uso de una férula nocturna que es una especie de inmovilización de tubillo que estira la fascia plantar cuando dormimos. La cirugía queda reservada para los 5 % de pacientes que no responden a esas medidas no quirúrgicas.
Observación
Ni todo dolor en talón es fascitis plantar, por lo tanto, principalmente los pacientes que no presentan beneficios con el tratamiento, deben ser evaluados para otras causas en potencial como, por ejemplo, túnel del tarso, tendinitis en la inserción del Aquiles y atrofia de la gordura plantar del calcáneo.